La economía británica entró en recesión en el último trimestre de 2023, según cifras oficiales publicadas el jueves. El PIB cayó un 0,3% en el cuarto trimestre tras una caída del 0,1% en el trimestre anterior, según informó la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS). Una recesión técnica generalmente se define como dos trimestres sucesivos de contracción de la producción. Según la ONS, los tres principales sectores de la economía (servicios, producción y construcción) registraron caídas en el cuarto trimestre. Para todo 2023, se estima que la economía aumentó un 0,1%, lo que la ONS describió como “el cambio anual más débil en el PIB real desde la crisis financiera de 2009”, excluyendo el año pandémico de 2020. En 2022, el crecimiento se mantuvo al 4,3%. Según el gobierno, la alta inflación ha sido el mayor obstáculo al crecimiento. Aunque el crecimiento de los precios en el país ha disminuido desde el máximo del 11% registrado en 2022 y se situaba en el 4% en enero, sigue siendo el doble del objetivo del 2% del Banco de Inglaterra. Algunos economistas también atribuyen parcialmente el débil desempeño económico a los efectos del Brexit. Los datos publicados el jueves representan una estimación preliminar y están sujetos a revisión, señaló la ONS.
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